"Lo que también han aprendido y recibido y oído y visto en mí, esto practiquen, y el Dios de paz estará con ustedes."
Filipenses 4:9 NBLA
Todo pastor tarde o temprano se irá familiarizando con el arte de la predicación, este es un ministerio crucial en la vida de una congregación. Pero el pastor no debe olvidar que está llamado a no esconderse detrás de un púlpito sino a estar en medio del rebaño e ir delante de este como guía. Es por eso que Pablo conocía el poder del testimonio diario y constante de su parte, y que aquellos con los cuales había compartido en la congregación podían observar.
La mayoría de la congregación no recordará muchos de nuestros mensajes pero sí que tendrán un impacto constante si nos ven andar en el mensaje en todas las formas y las circunstancias que vamos a tener que vivir. Por ello siempre he creído que preparar un mensaje de una hora es una ardua tarea pero la de un mensaje caminante de 24 horas es una tareas sin descanso, pero hay una promesa, "el Dios de paz estara con ustedes" hace que merezca la pena. Por ello el pastor que sabe y vive esto, dejará un mensaje difícil de olvidar.