"Fue despreciado y rechazado: hombre de dolores, conocedor del dolor más profundo. Nosotros le dimos la espalda y desviamos la mirada; fue despreciado, y no nos importó."
Isaías 53:3 NTV
Estamos en tiempos sin regresión, de auténtico desatino social, económico y político. Pero además debemos añadirle en este último tiempo la situación pandemica que nos ha acercado de una manera u otra al dolor de la enfermedad y la pérdida de personas queridas. Es en estos momentos donde la humanidad necesita un refugio y alguien que sepa entender por lo que está pasando. En verdad es nuestro pecado y abandono de Dios el causante del mal que hoy axfisia a la humanidad. Pero hubo un hombre que caminó entre nosotros "Jesús" que como perfecto cumplidor de la ley y justo receptor de la recompensa, no merecía padecer ninguna de las aflicciones que el pecado ha traído a la humanidad pues fue perfecto y sin mancha.
Pero en medio de nosotros decidió compartir nuestra aflicción y dolor, hasta tragarse las consecuencias del pecado de todas las generaciones siendo quebrantado y desechado por Dios Padre en la cruz del Calvario. En cierta medida él no nos explico el todo y el porqué del sufrimiento pero si se metió en nuestro sufrimiento, como apunto el profeta "conocedor del dolor mas profundo" consiguiendo una victoria sobre la muerte y el pecado la cual hoy nos regala para que no veamos esta vida como la última estación sino a través del arrepentimiento y la fe en su persona sepamos que hay un amanecer donde ya no habrá más llanto y dolor.
¡Un abrazo a todos!