El ser humano es imitador por diseño dado que Dios quiso que esté fuera un reflejo de Él y de su naturaleza. Por lo que parte de nuestra existencia se basa en ir buscando referencias a imitar y lo necio es hacerlo con aquellos que ignoran a Dios, sabiendo de las consecuencias que la historia demuestra del andar de los necios. Pero Pablo nos invita a imitar a Dios, me llama la atención que no usa directamente ninguna de las personas de la Trinidad, sino apunta a las 3 personas qué hay en Dios.

¿Porqué lo hace? Porque en ellas encontramos la relación y armonía perfecta, la falta de egoismo y búsqueda del bien de la otra así como un deleite en amarse. También cada una de las personas de la Trinidad tiene un rol en la restauración de la comunión de Dios con la humanidad. Por ello encontramos ingredientes increíbles dignos de imitar. Pero esta imitación a la que Pablo nos invita sería imposible si no tenemos relación con los demás. Por ello es necesario que estemos en medio de nuestras familias, congregación y de este mundo que tanto necesita ver imitadores del Dios que increiblemente nos amó y que no dejó ninguna duda al mandar a Jesucristo.