“Quien disculpa una ofensa consigue amistad, quien la recuerda pierde al amigo."

PROVERBIOS 17:9 BLP

Vivimos en un tiempo donde nos conectamos y relacionamos con mucha gente pero lamentablemente en la gran mayoría en un nivel muy superficial y con poca permanencia. Pero hay algo que necesitamos no solo para recibirlo sino también para serlo y es la verdadera amistad. Construir relaciones donde se den los ingredientes de la vulnerabilidad, la honestidad, el ser amonestado y arriesgarte a ser decepcionado no es nada fácil, pues como dice este proverbio en ocasiones necesitará del sacrificio, el perdonar y continuar con esa relación adelante, pero si se intenciona y persevera en construir ese tipo de amistad significativa y de incondicionalidad mutua, no solo nos ayudará en muchos de los desafíos de la vida, sino además nos protegerá y alentará a lo largo del viaje. Debemos empezar por ser nosotros ese tipo de amigo y aunque no serán muchos con los que se pueda construir este tipo de relación, pero lo que no es saludable es que no haya nadie en nuestra vida en este nivel. Si tienes este tipo de relaciones en tu vida cuídalas, si no las tienes busca dirección de Dios y cultivar con aquellos que Dios pueda poner en tu camino para vivir esta bendición y regalo que es la verdadera amistad.