“Para que todos sean uno así como tú, oh Padre, en mí y yo en ti, que también ellos lo sean en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste."
Juan 17:21 RVA2015
Pablo quien era un perito arquitecto para la obra de Dios y quien había recibido un gran conocimiento del plan Divino, después de escribir los tres grandes capítulos de Efesios llenos de pasión y teología, pasa a ser pragmático y proponer como se debe ver una congregación llena de vidas inflamadas por esa verdad, pero antes de pasar a pedir que sean humildes, bondadosos, llenos de paciencia y sepan soportar la realidad de hermanos en construcción, conecta con esta petición: "Así pues, yo, prisionero por amor al Señor, os exhorto a que llevéis una vida en consonancia con el llamamiento que habéis recibido."
EFESIOS 4:1 BLP
Pablo les va a pedir cosas que tienen que ver con la muerte al yo, al ego y al orgullo, pero les da la base para decidir vivir una vida que ponga su propósito en los planes de Dios y ello pasa por la unidad al Señor "prisionero por amor al Señor". Lo que Pablo les quería decir es que si él estaba viviendo falto de libertad y comodidad en una carcel romana por amor al nombre del Señor, por qué no iban ellos a poder pagar el precio de la muerte a su orgullo con tal de que el nombre del Señor sea honrado y su obra avance. Este es el punto que va a determinar en momentos de tensión si vamos a permanecer unidos o no, cuanto nos amamos a nosotros o cuanto amamos el nombre y la causa del Señor. He sido testigo de personas que causando división en nombre del Señor en el fondo estaban luchando por sus propios intereses. Termino con una pregunta: ¿Que estás dispuesto a vivir por causa del nombre del Señor y la unidad de su pueblo?