"No hurtarás."
Éxodo 20:15 RVR1960
Aunque este mandamiento es breve pero contiene toda la rotundidad para no dejar ninguna duda respecto a si mismo.
Cuando nos apropiamos de aquello que no es nuestro de una manera ilegítima, estamos dejando ver la condición de nuestro corazón. Descubrimos que no nos es suficiente con lo que tenemos y como decía Salomón "No se sacia el ojo de ver". Queremos con formas rápidas como el hurto apropiarnos de más y más, creyendo que eso nos hará más feliz. La Biblia nos da la instrucción para poder prosperar y poder tener cosas que sean de nuestra propiedad.
Ella nos dice que debemos hacerlo trabajando y de forma honrada. La mejor almohada que podemos tener en esta vida es la de una conciencia tranquila, por ello aunque tengamos menos, si lo que tenemos se nos ha sido concedido honradamente es bendición que viene del cielo y como dice también Salomón "mejor es un puño lleno con descanso que dos con aflicción de espíritu".
Tenemos una sociedad que se queja de aquellos que roban grandes cantidades, pero la realidad es que muchos lo hacen en cosas pequeñas cuando tienen la oportunidad. Cultivemos y seamos íntegros en cada pequeño detalle y que nadie pueda comprar nuestra integridad.