»Cuando cavas un pozo, puedes caerte en él. Cuando derrumbas una pared vieja, puede morderte una serpiente.«
Eclesiastés 10:8 NTV
Siempre que se emprende se abre la posibilidad al peligro y al riesgo, por eso es bueno rodearnos de todas aquellas personas, verdades y cosas que pueden proveernos protección no sea que aquello en lo que trabajamos para expandir nuestras posibilidades se convierta en nuestra propia trampa.
Ese es el caso de aquel que cava un pozo para encontrar agua para la vida y se encuentra ahogado en ese mismo pozo.Cohelet también nos habla del peligro de derribar los muros que han estado en cada generación; si nos creemos más listos que ellos y derribamos familia, moralidad, sexualidad, muros que fueron dados por la ley moral de Dios y que han sostenido sociedades pasadas...
Cuidémonos de no ser tan soberbios, de creer que no lo necesitamos y encontrarnos con la mordedura de la antigua serpiente que desde antaño siempre nos ha invitado a cruzar los límites para cumplir su deseo de destruirnos.