Contra tu pueblo han consultado astuta y secretamente,
Y han entrado en consejo contra tus protegidos.
Salmos 83:3 RVR 1960
Entramos en el segundo punto del porqué David y Asaf, escribieron estos inspirados y necesarios Salmos: 'Ellos amaban profundamente al pueblo de Dios 'Nadie duda de que David amó profundamente al pueblo de Dios, poniendo su vida contra el enemigo con un profundo deseo de vindicar el honor y el nombre de Dios siendo aún un adolescente.¿Quién no ha sido impactado con esas palabras cuando vio la situación del ejército israelita intimidado contra un solo hombre llamado Goliat? Entonces habló David a los que estaban junto a él, diciendo:
“¿Qué harán al hombre que venciere a este filisteo, y quitare el oprobio de Israel? Porque, ¿Quién es este filisteo incircunciso para que provoque a los escuadrones del Dios viviente?” (1 Samuel 17:26)En cuanto a Asaf, cuando leemos algunos de sus salmos, podemos ver su corazón hacia el pueblo de Dios, como en el Salmo 74:2: “Acuérdate del pueblo que adquiriste desde tiempos antiguos, de la tribu que redimiste para que fuera tu posesión. Acuérdate de este monte Sión, que es donde tú habitas. "Amar a Dios es amar a su pueblo, a sus ovejas, como Jesús le pidió a Pedro. ¿Qué buen pastor no hace algo contra el lobo? Y en este caso lo hacen clamando porque Dios actúe.
Esto nos da el punto para ver dónde estaba el peso de su corazón cuando enemigos injustos y crueles se levantaban a hacer daño al pueblo escogido, cruel e impíamente. No es de extrañar que encontremos a estos dos portavoces autorizados para escribir la mayoría de estos salmos, pues ellos son capaces de conectar con el sentir y celo de Dios, expresándolo bajo inspiración divina.
